8.30. Segundo café del día.
Inevitable no hablar de la investigación que abrirá el Ministerio de Interior contra los comentarios antisemitas en twitter. Me parecen absolutamente reprobables y merecedores del rechazo social.
No necesitamos escarbar mucho para descubrir el odio visceral que existe hacia el diferente. Diferente de raza, religión, color...diferente. Al ser humano le encanta buscar más las diferencias que los puntos comunes.
No puedo evitar, porque mi cerebro y mis sentimientos van más rápido que yo, pensar la de veces que he leído u oído comentarios racistas totalmente hacia el Islam y hacia la población musulmana, sea de la nacionalidad que sea.
Algunas personas tendríamos para escribir un libro.
O dos.
Pero creo que muchas veces el temor a que nos llamen victimistas nos lleva a censurarlo sólo en pequeña medida, o entre nuestro círculo más próximo, en lugar de hacerlo a gran escala.
Creo que los delitos de incitación al odio, de mensajes xenófobos, deberían perseguirse de oficio...pero la justicia está sobrecargada y ya no puede ni con su alma.
A lo largo de la mañana, revisando y recordando comentarios en noticias en la prensa escrita relacionadas con personas de creencia islámica me di cuenta de que, por desgracia, casi lo tenemos asumido como algo "normal" de la España más rancia y casposa, tan normal como el trato discriminatorio que se recibe a veces.
Pero seguimos sin denunciarlo cada vez que ocurre. Tal vez porque creemos que son cosas de gente desequilibrada (que debe serlo) a las que no hay que dar mucha importancia.
Por supuesto las redes han dado rienda suelta a la incontinencia verbal de descerebrados que encuentran cobijo entre quienes piensan como ellos y los respaldan.
Twitter es su particular reino.
Puedes encontrar desde personajes que te dicen que te vayas a tu país (cuando ya estás en él) a otros que si te cogen... si te cogen te harían todas las barbaridades posibles.
Por ejemplo: hay perfiles que se llaman abiertamente "putos moros" y que se definen como "españoles contra la invasión de una cultura criminal como lo es el Islam y que promulga la expulsión inmediata de los moros de nuestra España". Tan increíble como cierto.
Incluso, existe el hashtag #putosmoros donde desgraciadamente, hay muchos más de 17.000 tweets con un concepto incalificable de otras personas...
No estaría mal que el Ministerio de Interior actuase con la misma contundencia en todos los ataques al diferente y que el de Educación, potenciara el respeto que es lo que a muchos les hace falta. Respeto para no despreciar y odiar a ninguna persona por el simple hecho de ser diferente. Pero ni uno ni otro parecen estar por la labor, así que, aunque sólo sea para que reflexiones, critiques o compartas lo que acabas de leer, sentiré que he aportado mi granito de arena en mi peculiar "cruzada" contra los irrespetuosos.